lunes, 30 de mayo de 2011

La virtualidad no instrumental

La virtualidad, en su carácter no instrumental, implica el surgimiento de un nuevo modo de pensar debido a que es un elemento que trastoca la cotidianidad. Así, la virtualidad se ha convertido en el acontecimiento novedoso que incide en el modo de relacionarnos o comunicarnos. Ello conlleva a plantearnos otra problemática: ¿qué somos hoy? y ¿qué nos pasa?. En otras palabras, la virtualidad está constituyendo una racionalidad epocal o forma de entender, interpretar y comprender la cotidianidad que implica pensar desde la heterogeneidad y diversidad.


lunes, 23 de mayo de 2011

La virtualidad. un nuevo modo de pensar

El modo como incide ese acontecimiento (la virtualidad) en la manera de actuar y pensar del individuo se caracteriza por la existencia de distintos soportes a través de los cuales se producen, circulan y consumen los saberes, esto amerita de un/otro discurso para explicar cómo aquel es un elemento de la realidad socio-educativa. Los nuevos soportes para la transmisión del saber e innovantes canales que inducen a nuevas subjetividades y distintas formas de pensar conjuntan elementos que generan una crisis de pensamiento en la episteme contemporánea. En consecuencia, es necesario redimensionar el discurso de lo educativo desde la virtualidad, razón por la cual se hace ineludible la construcción de nuevas categorías de lo educativo.


La virtualidad como facilitadora de la transmisión del saber

La transmisión clásica del saber estuvo orientada por un telos: la paideia; la moderna fue guiada por la concepción mecanicista newtoniana, donde la vida está determinada por la bilduing (formación) y la contemporánea, tiene como elemento catalizador el proceso tecnológico. La virtualidad más allá de una concepción instrumentalista o tecnológica facilita un giro a la transmisión del saber, potenciada por la interactividad que hoy atraviesa el tejido social en su conjunto, incluyendo la institución escolar.


El impacto que genera la virtualidad en la transmisión del saber puede ser incrementado por los procedimientos y protocolos acordes con las necesidades de eficiencia en la transmisión de la información. Asimilar la transferencia y difusión del saber es desplegar ciertas competencias[1]. El reto para los sistemas educativos es garantizar aprendizajes que permitan desarrollar esas competencias para la incertidumbre y novedad. En este contexto, las personas inmersas en la virtualidad   tienen la opción de formarse integralmente para utilizar los medios telemáticos y sus respectivos lenguajes eficientemente y, así poder maximizar sus competencias como sujet@s  crític@s, imaginativ@s y creativ@s.


[1]El usuario debe poseer ciertas competencias de orden tecnológicas (saber hacer o utilizar las herramientas o medios digitales), sociales, de comunicación (feed-back, trabajo colectivo e individual, negociación, relación interpersonal, saber-hacer y social), teóricas (nuevos conocimientos y nuevas teorías del aprendizaje en situaciones profesionales) y  psicopedagógicas (métodos de enseñanza con la ayuda de herramientas tecnológicas, métodos de tutoría y monitoreo en situación de autoformación, orientación profesional, técnicas de desarrollo profesional, métodos de individualización del aprendizaje, entre otras). Tejada, 2004

La virtualidad

Los  usuarios virtuales deben aprender a obtener información de acuerdo con sus necesidades y el momento histórico que viven. El reto para los sistemas educativos es garantizar que la información producto de la innovación, creatividad, imaginación e interactividad pase a ser de uso común para la mayoría de los miembros de la sociedad con el fin de desarrollar todas las potencialidades individuales y colectivas, para de esta forma enfrentar en la vida diaria la incertidumbre, la novedad, una de ellas: la virtualidad.



Los distintos escenarios, en especial el ámbito educativo,  amerita ser reflexionado a partir de un nuevo modo de pensar la virtualidad. Entender e interpretar el ámbito mencionado, como elemento que conforma la racionalidad epocal, requiere tener presente sus diferentes concepciones para contrastarlas con la virtualidad más allá de su aspecto instrumental. Esto conlleva a plantear una sinopsis de la virtualidad, su problemática, guiada por la concepción arquelógica-genealógica, para luego analizar críticamente las opciones que le dan vigencia a ésta como una expresión de la realidad socio-educativa.

lunes, 16 de mayo de 2011

La virtualidad

La virtualidad en escenarios emergentes sustentado en su carácter no instrumental como propuesta genera categorías, formas de ver las cosas, pensar, actuar, una nueva realidad y relacionarnos donde la producción, circulación y consumo del saber forman parte de nuestra cotidianidad concebido bajo un pensamiento distinto al tradicional. Por lo que se hace necesario reflexionar acerca de la pertinencia, comprensión y construcción de nuevos saberes en los entornos virtuales en la nueva sociedad: entre las múltiples posibilidades de opciones dentro de la virtualidad en diferentes contextos y específicamente en la praxis escolar tenemos un nuevo espacio social de comunicación y formación en función del cual se debe redimensionar el concepto de educación: la escuela. No se trata de aplicar las TIC a los sistemas educativos tradicionales, sino estudiar las opciones que nos brindan la virtualidad en un espacio social-interactivo donde está presente una sociedad icónico-oral para enfrentar en la vida diaria la incertidumbre, la novedad, en nuestro caso: la virtualidad en escenarios o redes emergentes.